Melella: “Con la universidad pública no se negocia, la gente ya puso un límite”
El gobernador de Tierra del Fuego, Gustavo Melella, cuestionó duramente al presidente Javier Milei en el marco de la movilización federal en defensa de la universidad pública. El mandatario afirmó que “la Provincia y el país dijeron basta a la motosierra” y advirtió que el ajuste nacional “ya cruzó todos los límites posibles”.
La jornada tuvo un fuerte acompañamiento en las calles de distintas ciudades del país, incluida Tierra del Fuego. Para Melella, la masiva participación “mostró el signo de salud que todavía conserva la Argentina” y dejó en claro que “cuando se trata de la educación, de la salud o de la discapacidad, el pueblo no está dispuesto a ceder”.
El gobernador reconoció que parte de la sociedad confió en Milei buscando un cambio, pero remarcó que “nadie imaginó que ese cambio significaría destruir lo esencial”. Según describió, el impacto del ajuste “se siente en los hogares, donde cada vez cuesta más llegar a fin de mes y lo que se termina es la esperanza”.
Melella se mostró especialmente crítico con el recorte en las universidades. “Negar el futuro a nuestros jóvenes es condenar al país a la desigualdad”, sentenció, y agregó que la única salida será “cuando el Gobierno nacional entienda que debe poner un freno al ajuste”.
El mandatario también subrayó que los fueguinos “defendieron en las calles a la universidad pública, que es defender el conocimiento, la soberanía y la educación de nuestros hijos”. A su juicio, los recortes no son solo números: “quitan salud, quitan oportunidades y limitan el futuro de millones de argentinos”.
En la misma línea, sostuvo que existe un consenso social innegociable: “la Universidad Pública y el Hospital Garrahan son patrimonio de todos; nadie puede tocarlos”.
La movilización también fue respaldada por referentes políticos provinciales. El candidato a diputado nacional por Fuerza Patria, Agustín Tita, aseguró que los fueguinos “volvieron a demostrar orgullo por un sistema universitario gratuito que permitió a millones acceder a una profesión y a la movilidad social ascendente”.
Tita responsabilizó al Ejecutivo nacional por la crisis del sector: “el recorte feroz en educación, salud y discapacidad muestra la insensibilidad de este presidente, que ajusta en nombre del mercado a costa de la vida cotidiana de la gente”.
El dirigente reclamó que el Congreso escuche la voz de la protesta y rechace el veto presidencial. “La gente puso un límite, la Universidad no se toca”, enfatizó, y ligó la movilización al escenario electoral: “el mensaje ya se vio en Buenos Aires y en octubre se ratificará en todo el país. La responsabilidad fiscal no puede ser excusa para destruir lo esencial”.
