La Provincia avanzó con la transferencia de tres áreas hidrocarburíferas de YPF a Terra Ignis
El Gobierno de Tierra del Fuego oficializó la cesión de tres áreas petroleras que actualmente opera YPF a la empresa provincial Terra Ignis Energía SA. La decisión quedó establecida en el Decreto 2705/25, publicado en el Boletín Oficial, y ahora será la Legislatura quien deberá definir si convalida la transferencia y otorga la prórroga de explotación por una década.
El convenio, firmado previamente entre el gobernador Gustavo Melella y el CEO de YPF, Horacio Marín, abarca los yacimientos Lago Fuego, Tierra del Fuego y Los Chorrillos, todos ellos catalogados como áreas maduras. Las concesiones actuales, autorizadas por las leyes provinciales 997 y 998, tienen vencimientos previstos entre abril de 2026 y noviembre de 2027, por lo que la continuidad operativa depende de la aprobación legislativa.
De ser avalada la iniciativa, Terra Ignis obtendría una extensión de los plazos hasta 2036 y 2037, según cada bloque. Desde el Ejecutivo argumentaron que esta medida busca evitar la interrupción abrupta de actividades luego de que YPF expresara su intención de desprenderse de activos convencionales en distintos puntos del país. También remarcaron la necesidad de sostener la producción local de gas y petróleo, la preservación de empleos y el cumplimiento de estándares ambientales.
El decreto contempla además la renuncia del Estado provincial a posibles reclamos contra YPF ligados a su desempeño como concesionaria, excepto en los casos relacionados con activos excluidos o tareas de abandono no contempladas.
Uno de los puntos centrales de la decisión es la situación de la planta San Sebastián, clave en el procesamiento de gas natural y en la provisión energética para la provincia. Según lo indicado por el Gobierno, un retiro anticipado de YPF podría poner en riesgo el abastecimiento y generar pérdidas económicas significativas, por lo que la transferencia aparece como una alternativa para asegurar el funcionamiento del complejo.
El proceso administrativo comenzó el 10 de noviembre, cuando YPF y Terra Ignis firmaron el acuerdo de cesión. Al día siguiente, ambas compañías solicitaron formalmente la autorización nacional y la extensión de los plazos de explotación, tal como exige el marco regulatorio. Finalmente, el 14 de noviembre, Melella y el ministro de Economía, Francisco Devita, refrendaron el decreto que ahora será analizado en el ámbito legislativo.
La continuidad de estos yacimientos, considerados estratégicos para la matriz energética fueguina, dependerá del debate parlamentario que tendrá lugar en las próximas semanas.