
La Caja Compensadora enfrenta una crisis financiera y busca alternativas para garantizar los pagos
El presidente de la Caja Compensadora, comisario general Héctor Bordón, reconoció públicamente la compleja situación económica que atraviesa el organismo, lo que impide asegurar la regularidad en el pago de haberes a jubilados, retirados y pensionados.
Un desbalance estructural
Actualmente, la Caja administra tres regímenes: el de compensación territorial, el de retiro de la Policía Provincial y el del Servicio Penitenciario. Según Bordón, mientras los beneficiarios provinciales percibieron sus haberes completos, quienes integran el régimen territorial aún tienen pagos pendientes.
El organismo cuenta con 1.040 beneficiarios frente a 2.500 aportantes activos, una proporción que resulta insuficiente para la sostenibilidad del sistema. “Un esquema equilibrado debería contar con entre 3.000 y 4.000 aportantes por cada 1.000 beneficiarios. Hoy esa relación está desfasada y eso nos genera un problema de fondo”, detalló el funcionario en declaraciones a FM Master’s.
Ingresos limitados y bienes desaprovechados
Bordón explicó que la entidad se financia con aportes y contribuciones provinciales, además de poseer inmuebles que, sin embargo, no generan ingresos. Como ejemplo, mencionó el edificio central en Ushuaia: “La planta baja está en uso, pero los pisos superiores no son habitables. Necesitamos inversión para ponerlos en valor”.
En ese contexto, se resolvió poner a la venta un terreno de 5.000 metros cuadrados ubicado detrás de la Comisaría Tercera de Ushuaia. El presidente de la Caja consideró que concretar esa operación permitiría reorganizar los pagos de manera inmediata.
Reclamo por una reforma legal
El titular de la entidad también señaló la urgencia de actualizar el marco normativo vigente. “La ley que regula la Caja tiene 15 años y quedó desfasada. Requiere una reforma que otorgue previsibilidad no solo a corto plazo, sino también hacia el futuro”, enfatizó.
Apoyo del Gobierno y mensaje de esperanza
Pese a la delicada situación, Bordón destacó la asistencia del Ejecutivo provincial, el Tribunal de Cuentas y la Fiscalía de Estado, que aportaron recursos adicionales y adelantaron fondos para aliviar la falta de liquidez.
Finalmente, dejó un mensaje dirigido a jubilados y pensionados: “Somos optimistas. Estamos trabajando para normalizar la situación, pero necesitamos tiempo y decisiones estratégicas que nos permitan garantizar la estabilidad de la Caja en los próximos años”.