“Hay cosas que pasaron que fueron aberrantes”
El Tribunal de Juicio de Río Grande ha dictado sentencia condenatoria para Carlos Mallo, quien deberá cumplir 18 años de prisión efectiva por delitos relacionados con abuso sexual gravemente ultrajante y promoción de la corrupción de menores.
En una resolución que ha causado conmoción, el tribunal estableció la pena tras analizar la gravedad de los hechos, en los que se evidenció el daño irreparable causado a la víctima, un menor, durante el proceso de instrucción. La querella, encabezada por la abogada María Soledad Ponce Salazar, ha denunciado una serie de irregularidades que marcaron el desarrollo del caso.
Durante su intervención, la abogada Ponce Salazar denunció que se vulneraron derechos fundamentales del menor, al exponer información sensible de su historia clínica, lo que calificó de “aberrante” e inaceptable. Además, puso en tela de juicio la actuación del fiscal, señalando que su inacción permitió que se produjeran graves irregularidades durante la instrucción de la causa.
En sus declaraciones, la representante de la querella enfatizó la necesidad de una investigación paralela para esclarecer la falta de intervención por parte de las autoridades fiscales. “Se le pidió al doctor Césari Hernández que se apartara de la causa, pero el fiscal permaneció inerte, y esto ha facilitado que se vulneren derechos irreparables”, afirmó Ponce Salazar.
Por otro lado, se destacó la importancia de brindar un acompañamiento integral a la víctima. La abogada señaló que, además del soporte familiar por parte de la familia materna, el menor contaba con tratamiento psicológico previo a iniciar la escuela, medida que se debe intensificar para ayudarle a sobrellevar el trauma, agravado por la muerte de su madre.
Durante los alegatos, tanto el Fiscal Mayor Martín Bramati como la querella solicitaron una condena de 20 años para Mallo, cifra que finalmente se redujo a 18 en la sentencia. La decisión pone de relieve la tensión existente entre las demandas del sistema de justicia y las expectativas de la sociedad en casos de tan delicada naturaleza.