Grave denuncia por falta de atención en salud mental en Ushuaia: “Está en el piso, no la puedo levantar”
Una vecina del barrio Dos Banderas de Ushuaia denunció públicamente la crítica situación de una mujer con padecimientos psiquiátricos que, según relató, no recibe el tratamiento ni la contención adecuada por parte del sistema de salud. La mujer, que requiere medicación y seguimiento profesional urgente, ha sido derivada de un lugar a otro sin obtener respuestas concretas.
Beatriz —quien acompaña y asiste a la paciente desde hace años— expresó su desesperación ante la falta de atención médica adecuada. Según explicó, la mujer lleva más de 15 años dependiendo de clonazepam y otros psicofármacos, y actualmente se encuentra sin medicación ni asistencia estable, lo que la ha llevado a sufrir cuadros de abstinencia, temblores y hasta intentos de suicidio.
“La ambulancia viene, le dan algo para calmarla, pero no duerme hace días. La psiquiatra que la trataba ya no la atiende, y en el centro de salud tampoco la medican. Solo le dicen que tome agua y se relaje”, relató angustiada Beatriz.
Afirmó también que, ante la falta de respuestas, se han visto obligadas a recorrer distintos centros de atención, desde el Capcush hasta la guardia del hospital, sin que ninguna institución brinde una solución concreta. “Nos patean de un lugar a otro, y mientras tanto ella está temblando, con abstinencia. Es una situación muy dura, y yo no soy médica para poder ayudarla como corresponde”, señaló.
La mujer indicó que la paciente fue atendida en ocasiones por una ambulancia y trasladada a la guardia, pero que sólo le curan las heridas sin abordar el problema de fondo. “La medicación no aparece, y nadie se hace cargo. En el hospital le dieron un papel para que regrese al Capcush, pero allí le dicen que debe buscar a su psiquiatra de siempre, quien ya no está disponible”, explicó con impotencia.
Beatriz también denunció el maltrato por parte del personal médico: “No hay empatía, no están preparados para contener a alguien en esa situación. Nos atienden con bronca, sin paciencia”.
Finalmente, advirtió que el estado de salud de la mujer se agrava con el paso de los días y teme por su vida. “Ella quedó tirada en el suelo. Le dan convulsiones, no se puede mover, no la puedo ayudar sola. Ya no sabemos a dónde ir ni qué hacer”, expresó entre lágrimas.
Este nuevo caso vuelve a poner en el centro del debate la necesidad urgente de fortalecer la atención en salud mental en la provincia, con recursos profesionales capacitados, seguimiento constante y un sistema articulado que evite que personas vulnerables queden abandonadas en momentos críticos.
