Fallo contra BGH enciende alarmas y deja a la industria fueguina al borde de una crisis laboral
Un reciente pronunciamiento judicial en Río Grande encendió las alertas en todo el entramado industrial de Tierra del Fuego. La Cámara de Apelaciones de la ciudad, integrada por los jueces Julián De Martino y Federico Martín Villella, cuestionó el uso de la figura de “prestación permanente discontinua” (PPD) en la causa “Mamandi Ramiro y otros c/ BGH S.A.” y condenó a la empresa por las diferencias salariales reclamadas por sus empleados.
De acuerdo con el fallo, BGH no logró demostrar que la contratación bajo esta modalidad correspondiera a una actividad estacional, tal como exige el artículo 96 de la Ley de Contrato de Trabajo. Los magistrados, además, advirtieron sobre un uso abusivo de la norma por parte del empleador, señalando que ningún acuerdo colectivo puede aplicarse de forma que restrinja derechos laborales reconocidos por la Constitución Nacional.
Ese razonamiento llevó al tribunal a poner en duda incluso la validez de la Resolución 620/2010 del Ministerio de Trabajo, que homologó el acuerdo sectorial que habilitó la contratación bajo modalidad PPD en la industria electrónica fueguina.
La sentencia abre un escenario inédito que, según especialistas, podría generar un “efecto cascada” de reclamos por parte de trabajadores que hoy se encuentran bajo la misma modalidad contractual. Voces empresariales advierten que una ola judicial de esta magnitud pondría en jaque la sustentabilidad económica del sector.
Lejos de tratarse de un caso aislado, el fallo representa un antes y un después en la regulación laboral provincial. Ahora, todo el sector permanece a la expectativa de una eventual intervención de instancias superiores, que podrían definir el futuro de la modalidad PPD en Tierra del Fuego.
