El Gobierno evalúa eliminar el impuesto interno a los autos de lujo: cómo impactaría en los precios desde enero
El último borrador de la Reforma Laboral que trascendió en las últimas horas incluyó una sorpresa para el sector automotor: un artículo que propone eliminar el impuesto interno a los automóviles, tributo que actualmente alcanza a los modelos de mayor valor. La medida, que se negociaba desde hace tiempo con distintas cámaras empresarias, generó expectativas ante su posible tratamiento en las sesiones extraordinarias del Congreso.
El impuesto interno —popularmente conocido como “impuesto a los autos de lujo”— fue reinstaurado en 2020 y se actualiza trimestralmente según el índice de precios mayoristas del sector. Hoy se aplica exclusivamente a vehículos particulares, por lo que pick-ups, furgones y vans no lo tributan.
Cuánto bajarían los precios
Si la eliminación se concreta a partir del 1° de enero, como pretende el Gobierno, el efecto inmediato sería una baja aproximada del 22% en el precio de los autos y SUV más caros del mercado, es decir, aquellos que actualmente superan los valores de las escalas vigentes.
Sin embargo, la sola expectativa del cambio podría provocar una consecuencia inmediata: que muchos compradores decidan postergar sus compras a la espera de precios más bajos, tal como ocurrió en enero de 2024, cuando un anuncio similar finalmente no se concretó.
“Quien estaba por comprar un auto de alta gama automáticamente esperará a que se apruebe la ley, porque en enero va a estar más barato. Esto puede detener las ventas de ese segmento”, explicó a Infobae Sebastián Domínguez, CEO de SDC Asesores Tributarios.
Por qué la eliminación aparece en una reforma laboral
El tributarista sostuvo que incluir la medida en la Reforma Laboral y no en una reforma tributaria responde a razones operativas. “Las reformas tributarias pueden ser retroactivas si son a favor, pero es inviable en este caso. Si el impuesto se eliminara retroactivamente, habría que devolver fondos desde las terminales a las concesionarias y desde el Estado a las terminales. No es operativo. Por eso es importante que salga ahora”, señaló.
Cómo afecta la estructura actual de impuestos internos
Desde su reinstauración, la escala 1 aplicaba un 20% (25% de impacto real) a vehículos de gama media, aunque llegó a alcanzar modelos populares por efecto de la inflación. Esa escala fue suspendida en enero de 2025 para evitar que autos de mayor volumen quedaran alcanzados.
La escala 2 —que gravaba con un 35% y bajó al 50% este año— se aplica hoy a los modelos que superan los $102.000.000, con un impacto efectivo del 53%.
Efecto en cadena: cómo cambiarían los precios del mercado
En el sector consideran que la medida provocaría una baja generalizada en las franjas superiores e intermedias del mercado. “Si un auto que costaba $110 millones baja a $90 millones, los que estaban en $80 u $85 van a tener que bajar para tener compradores. Y si esos bajan a $70 millones, los que estaban en ese precio también tendrán que ajustarse”, señaló un alto ejecutivo automotriz.
El impacto final dependerá de los márgenes de cada marca, pero el consenso en la industria es que la eliminación del tributo “sería una excelente noticia” al corregir distorsiones y mejorar la competitividad del mercado.