Dolor y reclamo de justicia por la muerte de un joven en una cárcel de Río Grande

Rosa Susana Amaro, madre de Ramón Sebastián Zarza, el joven de 25 años que fue hallado sin vida en la Unidad de Detención N°1 de Río Grande, exige que se esclarezca lo ocurrido. La mujer expresó su profundo dolor y afirmó que su hijo fue entregado muerto tras haber sido trasladado a prisión en condiciones completamente distintas: “Él estaba lleno de vida, consciente, tenía esperanzas. Me lo llevaron vivo y me lo devolvieron sin vida”, lamentó.

El fallecimiento ocurrió el pasado 6 de agosto, pero hasta el momento la familia no recibió información oficial que explique las circunstancias de la muerte. “Me sacaron lo más valioso que tenía”, dijo Rosa, quien también contó que tiene seis hijos y que Ramón era el menor de sus dos varones. “No era un mal chico, cometió un error, pero estaba tratando de salir adelante”.

Conmovida, la madre relató que su última conversación con Ramón fue el 5 de agosto, apenas un día antes del trágico desenlace. “Hablamos durante 45 minutos, lo sentí bien, con ganas, esperanzado”, recordó. Desde entonces, no ha tenido ninguna explicación clara por parte de las autoridades.

La mujer, que trabaja limpiando casas para mantener a su familia, incluyendo a un hijo con discapacidad que necesita cuidados constantes, dijo que su situación económica le impidió visitar a Ramón durante su tiempo en prisión. “No tengo casa propia, alquilo desde hace años y hago lo que puedo para sobrevivir”, explicó.

Finalmente, Rosa Amaro imploró ayuda para poder obtener justicia por su hijo. “No busco otra cosa que saber la verdad. Pido que se investigue qué pasó en esa cárcel y por qué mi hijo terminó muerto. Solo quiero respuestas”, cerró.